PONER LÍMITES: EL ARTE DE HACERSE VALER

Hay muchas cosas que definen nuestra identidad, entre otras, la manera en la que decidimos vivir, que valores son importantes para nosotros y como nos relacionamos con nosotros mismos y con el mundo.

La manera en la que interactuamos con los demás también perfila nuestra identidad y con ello nuestra autoestima. Para poder tener una autoestima sana hemos de desarrrollar la  capacidad de poner límites.

POR QUÉ ES IMPORTANTE PONER LÍMITES

Para tener una buena relación con los demás, hemos de empezar por nosotros mismos, respetándonos, ¿si no te respetas a ti mismo, quién lo hará ?

Sólo desde el autorrespeto podemos respetar a los demas. Walter Riso.

Vamos a poner una comparativa muy sencilla entre un restaurante de cinco tenedores y un buffet libre. En algunos de estos restaurantes tan glamurosos, las raciones tienden a ser más bien minimalistas, muy bien presentadas eso sí, pero una cantidad limitada, la gente lo saborea, lo aprecia. En ocasiones en los buffet libres hay quién se llena el plato hasta arriba y termina dejando la mitad, total no hay límite. Pues así nos pasa a nosotros cuando no ponemos límites a los demás, nos toman por garantizado, como si fueramos un buffet libre y no creo que tengas muchas ganas de que alguién te trate así, ¿a qué no?

A parte de que te tomen por garantizado, hay otras consecuencias. Por ejemplo, si permites reiteradamente que la gente te falte al respeto, llega un momento que reaccionas con ira debido a la frustración y enfado acumulados.

Por otra parte reaccionar con  agresividad, además de debilitar enormemente tu autoestima, no resulta nada efectivo al marcar límites.


hacerse valer


¿CÓMO ESTABLECER UNOS LÍMITES SANOS?
 
Conociéndonos a nosotros mismos y sabiendo cuales son nuestros límites. Es decir, darte cuenta de cuando alguién te ha dicho algo que te ha ofendido y lo has dejado pasar por alto, cuando justificas algún comportamiento irrespetuoso, si te has sentido desatendido o poco valorado por alguíen, etc...

Nadie puede hacerte sentir inferior sin tu consentimiento. Eleanor Roosevelt

Escucha tus emociones, ¿estás enfadado o frustrado con alguién? examina de donde viene esa emoción. A veces hemos dejado llegar la situación demasiado lejos y en un acto reflejo reaccionamos con agresividad porque estamos a la defensiva.

También es interesante darse cuenta en que terrero nos cuesta poner límites, si es en el profesional, personal, etc….

El hecho de reconocer nuestros límites es muy importante porque si no lo hacemos a tiempo, la situación escalará y puede ser que cuando queramos reaccionar ya sea demasiado tarde o lo hagamos con agresividad. Para ilustrar esto, nada mejor que un cuento :


El sindrome de la rana hervida

Si ponemos una rana en una olla de agua hirviendo, inmediatamente intenta salir. Pero si ponemos la rana en agua a la temperatura ambiente, y no la asustamos, se queda tranquila. Cuando la temperatura se eleva de 21 a 26 grados centrados, la rana no hace nada, e incluso parece pasarlo bien. A medida que la temperatura aumenta, la rana está cada vez más aturdida, sabe que algo va mal, pero no está en condiciones de darse cuenta de que debe salir inmediatamente de la olla. Aunque nada se lo impide, la rana se queda allí y hierve. ¿Por qué? Porque su aparato interno para detectar amenazas a la supervivencia está preparado para cambios repentinos en el medio ambiente, no para cambios lentos y graduales. Para aprender a ver procesos lentos y graduales tenemos que prestar atención no sólo a lo evidente, a lo que nos cuentan, sino también a lo sutil.

Trata de dejar las cosas claras desde un principio :
Esto implica que muestres desde el principio que es aquello que te molesta.
-Si no actuas de inmediato lo van a seguir haciendo. Pongamos por caso que una amiga llega siempre media hora tarde pero tú nunca le dices nada hasta que después de meses explotas. ¿Cómo crees que va a reaccionar ella? No va a entender tu enfado porque siempre lo has permitido e incluso tal vez te increpe tu actitud iracunda.

Practica la comunicación asertiva: di las cosas desde el respeto y la tranquilidad pero de una manera clara y contundente. No tienes porque justificarte ni andar con explicaciones, simplemente expresar tus necesidades.  Recurda que te mereces ser tratado con respeto.

A mayor asertividad mayor será la seguridad en nosotros mismos

Digamos lo que tengamos que decir. Podemos decirlo suavemente pero con firmeza, hablando con el corazón. No necesitamos ser críticos o no tener tacto, ni culpar o mostrarnos crueles cuando decimos nuestras verdades. Melody Beattie

-Se consistente: si dices que te molesta algo pero aún así lo sigues tolerando una y otra vez imaginate la idea que la otra persona se puede hacer de ti, dificil respetarte cuando tu no te respetas a ti mismo.

Se flexible: marcar límites no implica rigidez. Si observamos la situación desde la comprensión del otro, nos será más fácil entender su postura y tal vez lleguemos a un entendimiento que sea beneficioso para ambos.

-Liberaté de la aprobación ajena : Muchas veces pasamos por alto determinadas acciones que nos molestan de otras personas solamente por no discutir. El poner determinados límites te puede llevar a que ciertas personas desaparezcan de tu vida, sin embargo otros sabrán reconocer tu valor precisamente por haber sabido poner límites.

hazte valer


-Respeta a los demas y respetate a ti mismo. No normalices las faltas de respeto en las relaciones de poder. No caigas en aquello de es mi jefe, no tengo más remedio que aguantarlo. Los límites te protegen de las faltas de respeto. 

En ocasiones, sobrepasamos nuestro límites por una mera cuestión de supervivencia, pero aquí es importante plantearse si estamos tolerando una situación porque no nos queda otra o porque nuestra autoestima no está lo suficientemente alta para reivindicar nuestros derechos.

Si quieres ser respetado por los demás, lo mejor es respetarte a ti mismo. Sólo por eso, sólo por el propio respeto que te tengas, inspirarás a otros a respetarte. Fiódor Dostoievski

-Aprende a decir que no: en mucha ocasiones aceptamos los planes que otros nos plantean aunque no nos apetezca demasiado solamente por quedar bien. Si te cuesta decir no plantéatelo como reto y empieza por cosas pequeñas.
 
Cuando de sabe decir que no, el tiene una sabor muy distinto. Alejandro Jodorowsky

Marcar límites es una manera de ser integros con nosotros mismos. No te expongas a situaciones que te agotan, valora tu paciencia e inviertela en algo que merezca la pena.

-Atiende a tu lenguaje corporal, puede ser que te encuentres en una situación en la que alguien sobrepasa tus limites y tienes que soportar a esa persona diariamente, este desgaste puede que te afecte hasta hacerte sentir cabizbajo. Entrena una postura erguida y que te dé seguridad, el clásico “fake it till you make it”. Al principio te resultará forzado, luego te saldrá solo.

-No respondas de inmediato: Si te encuentras en una situación en la que una persona ha sobrepasado los límites en varias ocasiones y sabes que estás a la defensiva, igual te conviene calmarte y responder en otra ocasión antes de dar una respuesta agresiva.

-Celebra tus éxitos: poner límites no es nada fácil, sobre todo si hemos si estamos acostumbrados a anteponer las necesidades de los otros, por ello celebra cada paso que des por pequeño que sea.

¿Te cuesta poner límites? Si este artículo te ha servido de utilidad y sabes que también lo será para otras personas, se generoso y compártelo con ellas.

VOLVER AL HOGAR: ANTE EL DESENCANTO RECUPERATE A TI MISMO

Que la vida no siempre es como queremos es algo que todos sabemos. Sin embargo, no podemos evitar tener expectativas, sueños, imaginarnos conseguir todo aquello que queremos. ¿Pero, es que si no tenemos sueños ni expectativas, entonces, que tenemos?
 
Es cierto que se vive mejor sin expectativas pero no por ello es fácil de lograr, hay veces que nuestros proyectos se van al traste, las personas que queremos nos defraudan y vemos como nuestro mundo se derrumba frente a nuestros ojos y lo único que sentimos es el desencanto.

El desencanto te deja sin fuerzas, te hace preguntarte como has llegado a verte en esta situación, hace tambalearse todos tus pilares y en muchas ocasiones te obliga a empezar de nuevo. A dejar atrás todo lo que no pudo ser y plantearse como seguir adelante.

Tras la confusión, el dolor y el profundo desencanto podemos encontrar el aprendizaje. Puedes encontrar respuestas para entender que te ha llevado a esa situación y en ocasiones la respuesta se puede resumir de forma simple y clara:

TE HAS PERDIDO A TI MISMO; ya es tiempo de regresar al hogar y cultivar el amor propio.
Amarse a sí mismo es el comienzo de una aventura que dura toda la vida. Oscar Wilde.

amor propio frente al desencanto
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Para que lo veas más claro te pongo varios ejemplos de las diversas maneras en las que nos perdemos a nosotros mismos:

-Tienes muchas expectativas: te sientes desilusionado por lo que esperabas de tus amigos, familia o pareja, por lo que no han hecho por ti. Aquí es interesante preguntarse si las cosas que esperas de otros te las estás dando tu mismo. Si esperas consideración por parte de tus amigos pregúntate si te la estás dando a ti mismo. Si te enfadas porque tu pareja no te dice lo guapo que estás, pregúntate si te lo dices tú a ti mismo ( o mejor aún, pregúntate si tu te sientes guapo)

Las expectativas eran como la porcelana fina. Cuanto más fuerte te agarrabas a ellas, más probable era que se rompiesen. Brandon Sanderson

-Vives instalado en la queja: criticas a tú jefe porque te hace la vida imposible en el trabajo, en lugar de preguntarte porque estás en un trabajo que no te gusta y por qué no haces nada para cambiar la situación. Si esperas reconocimiento y no te lo dan, igual es hora de reconocer tu propio valor y actuar en consecuencia.

Había sido un hombre que se deleitaba con lo espantosa que era su vida, y prefería quejarse a cambiarla. John Katzenbach

-Asumes un rol de victima: de la queja pasas a la victima, consideras que tu jefe, el gobierno, tu país o tu familia tienen la culpa de tus problemas y das por sentado que tu no puedes hacer nada para solucionarlo.

Decir que no tienes otra opción es liberarte a ti mismo de la responsabilidad.-Patrick Ness.

-Delegas tu responsabilidad: como te consideras una victima delegas tu responsabilidad y culpas a los demás de tus decisiones. Aceptas un trabajo que no te gusta porque tus dirigentes han destrozado el país, siempre ves en otros la causa de tus problemas.

El precio de la grandeza es la responsabilidad.-Winston S. Churchill.

-Te muestras agresivo con aquellos que no comulgan contigo o que no cumplen con tus expectativas. Como tienes unas expectativas tan altas en otros, te frustras cuando las cosas no salen como tu quieres. Caes en el resentimiento sin darte cuenta de que te haces un esclavo de tu emoción. Diriges tu ira contra los demás porque no te dan lo que tú no tienes, siendo que esto es un reflejo del enfado que tienes contigo mismo por no darte o no atreverte a buscar lo que necesitas.

El resentimiento es como beber veneno y esperar que la otra persona muera. Agustín de Hipona

-Eres presa de la culpa: lo mismo que tienes expectativas puestas en los demás que a veces no son factibles, tienes expectativas sobre ti mismo que cuando no se ven cumplidas te llevan a fustigarte. Ya tendría que haber conseguido ese ascenso, a los treinta ya tendría que estar casado....

Si el sentimiento de culpa fuera un bicho, sería un pulpo. Todo viscoso y retorcido y con cientos de tentáculos que se te enroscan en las tripas y te las aprietan fuerte Annabel Pitcher

-Caes en el juicio: juzgas a los demás como malos cuando no cumplen con tus expectativas. Recuerda que los demás son sólo un reflejo de nosotros mismos, cuanto más duro eres con los demás más lo eres contigo mismo.

Si nosotros somos tan dados a juzgar a los demás, es debido a que temblamos por nosotros mismos. Oscar Wilde
-No das desde la honestidad. Eres generoso con los demás pero si los demás no son iguales contigo te sientes traicionado cuando en realidad si das algo desde la honestidad no esperas nada a cambio.

Si alguna vez no te dan la sonrisa esperada, sé generoso y da la tuya. Porque nadie tiene tanta necesidad de una sonrisa, como aquel que no sabe sonreír a los demás. Dalai Lama

-Te adaptas a lo que se espera de ti: las exigencias y las expectativas que pones en los demás son a veces un reflejo de tus propias exigencias, quieres encajar en aquello que crees que se espera de ti y te olvidas de que tu eres perfecto tal y como eres y que no has venido a este mundo a cumplir las expectativas de nadie.

el desencanto como camino al amor propio
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-Te vuelves dependiente: al poner tus expectativas en los demás les das valor sobre ti mismo, bajando tu autoestima, cediendo tu poder y volviéndote dependiente.

Depender de la persona que se ama es una manera de enterrarse en vida, un acto de auto mutilación psicológica donde el amor propio, el autorrespeto y la esencia de uno mismo son ofrendados y regalados irracionalmente. W.Riso

Si te has visto reflejado en alguno de estos ejemplos es hora de recuperarte a ti mismo, es el momento de recuperar tu poder y comprender que tu eres fuente, que todo surge de ti, que tu felicidad depende de ti y que todo se puede revertir, ¿como? Revirtamos lo anterior:

-Tienes muchas expectativas versus aquello que espero de otros lo busco en mi.

Porque nadie puede saber por ti. Nadie puede crecer por ti. Nadie puede buscar por ti. Nadie puede hacer por ti lo que tú mismo debes  hacer. La existencia no admite representantes.  Jorge Bucay

-Vives instalado en la queja versus me enfoco en lo positivo y lo que no me gusta lo cambio, paso de ser reactivo y quejarme por todo a ser pro activo y cambiar aquello que no me convence.

Odiaba cada minuto de entrenamiento pero me decía: No pasa nada, sufre ahora y vivirás el resto de tu vida como un campeón.  Muhammada Ali

-Asumo un rol de victima versus yo puedo elegir mi actitud ante los problemas. Recuerda que nadie te puede hacer sentirte inferior sin tu consentimiento

La forma mas rápida de cambiar su actitud hacia el dolor es aceptar el hecho de que todo lo que nos sucede ha sido diseñado para nuestro crecimiento espiritual. (M. Scott Peck)

-Delegas tu responsabilidad versus tienes la opción de elegir tus propias decisiones, no digas que elegiste tal carrera porque tus padres así lo querían, que no haces tal cosa porque a tu pareja no le gusta, que no vives de tal manera porque otros no quieren. Es tu responsabilidad elegir como vives tu vida.

Debes asumir responsabilidad personal. No puedes cambiar las circunstancias, las estaciones o el viento, pero te puedes cambiar a ti mismo. Eso es algo que tienes a tu cargo.-Jim Rohn.

-Te muestras agresivo versus soy compasivo conmigo mismo, me cuido y me amo y por ende soy compasivo con los demás.

En el viaje, un compañero, y en la vida, compasión. Haruki Murakami

-Eres preso de la culpa versus soy un ser perfecto que hace lo mejor que puede con lo que sabe en el momento, aprendo de mis errores y trabajo siempre para ser la mejor versión de mi mismo.

Echarle la culpa a los demás en lugar de a uno mismo, eso está al alcance de cualquiera, ¿Sabes? Anna Gavalda

-Caes en el juicio: versus aceptación: te aceptas tal y como eres, con tus virtudes y tus defectos y así lo haces con los otros.

No podemos cambiar nada hasta que nosotros lo aceptamos. La condena no libera, oprime. (CG Jung)

-No das desde la honestidad versus das cuando tu quieres y cuando no, no lo haces simplemente con complacer a los demás, eres asertivo, sabes poner límites y te respetas a ti mismo.

Lo que das te lo das, lo que no das te lo quitas. Alejandro Jodorwosky

-Te adaptas a lo que se espera de ti versus vives tu vida como quieres y estás dispuesto a pagar el precio que sea por vivir en coherencia  a tus valores.

El primer paso al éxito es negarte a ser un cautivo de tu entorno; Mark Caine

-Te vuelves dependiente versus te sientes tan bien en tu piel porque vives en coherencia que no dependes de los demás, disfrutas de los demás desde el amor de verdad no desde el apego ni el miedo al abandono.

Es sorprendente cuantas personas van por la vida sin reconocer que sus sentimientos hacia los demás son en gran medida determinados por sus sentimientos hacia sí mismos, si usted no se siente cómodo de sí mismo, no puede estar cómodo con los demás. (Sidney J. Harris)

Como vemos, a veces las situaciones de desencanto que vivimos porque hemos puesto demasiadas expectativas en algo o en alguien. Cuando alguien nos defrauda, cuando los demás nos ningunean, cuando no avanzamos en la vida, en nuestras metas, etc.. son una manera que tiene el universo de decirnos: “eh tu espabila, mira hacia adentro, descubre que no te estás dando, recupera tu poder, acuérdate de que puedes elegir, no te vendas, cometer un error no te hace ser culpable de nada, no eres una victima, eres el que maneja el timón de tu vida”. Básica y llanamente, recupera el amor que hay en ti, está todo dentro de uno mismo.

El hombre no es más que lo que él hace de sí mismo.-Jean-Paul Sartre

Si crees que ya es hora de dejar atrás el desencanto y recuperar tu poder personal responsabilizate de vivir tu vida siendo fiel a ti mismo. Si crees que más gente necesita desarrollar su amor propio comparte este artículo con ellos.

POR QUÉ NOS DESMOTIVAMOS Y COMO RECUPERAR LA MOTIVACIÓN

En pleno agosto y con un calor de infarto me encuentro con un amigo haciendo jogging. El caso que le pregunto que como podía tener ganas de correr con este calor, y me dice que no le apetecía ni un poquito pero que tenía claro que quería correr determinada maratón.
 
Esto me llevó a pensar sobre la motivación. Desde luego en este caso la motivación no le pilló tumbado en el sofá con el aire acondicionado sino que fue él, el que llamó a la motivación. 

Todos hemos tenido épocas en las que estamos desilusionados, no nos salen las cosas como queremos, nos hemos llevado alguna decepción y algún proyecto que empezamos con mucha motivación ha quedado relegado, porque la motivación nos ha abandonado.

Aquí tenemos la cara y cruz de la moneda. La motivación no es permanente pero la buena noticia es que si ella no viene a nosotros, nosotros podemos ir a ella creándola día a día.

Podríamos decir que si realmente tienes muchas ganas de hacer algo, lo tienes en mente desde hace tiempo, lo más probable es que la motivación esté, escondida, pero esté. Tal vez está debajo de una bruma de confusión o de miedo pero está. La clave no es esperar a que llegue la motivación sino disipar la bruma que está obstaculizando nuestra motivación.

motivación


A veces tenemos una serie de bloqueos que lo llenan todo de bruma y no nos dejan ver la motivación, te cuento algunos de los que nos obstaculizan, que seguro te suenan:

-Esperar a estar completamente motivados y con plena convicción de que nos saldrán las cosas bien. Lo que lleva a la motivación es la acción, en cuanto des los primeros pasos tendrás más ganas de continuar, la inercia actúa a nuestro favor. Y respecto a la convicción de que todo va a salir bien, tendremos que lidiar con la incertidumbre, porque vivir es lo que tiene.

-Esperar a tener la suficiente confianza y seguridad en nosotros mismos. Aquí igual que en el caso anterior, irás ganando la seguridad a medida que emprendas acción. Ya os conté la anécdota de cuando aprendí a andar en bicicleta que me daba más miedo que un nublado, y pasar a la acción es lo que me dio la seguridad y la motivación.

-No tener ni idea de cómo empezar a hacer lo que quieres hacer. Esto es algo que desmotiva mucho, quieres hacer algo pero no tienes ni idea de cómo hacerlo, pues da igual empieza y en cuanto tomes acción irás viendo la luz al final del túnel.

Como ves de los obstáculos anteriores, lo que nos lleva a recuperar la motivación es la acción. Es decir, olvídate de la motivación y pasa a la acción, ponle pasión y diversión a todo lo que hagas. “Actúa: el primer paso es la mitad del camino” Visto esto, tomemos acción, pequeños y simples pasos que nos pueden ayudar a recuperar la motivación:

-Cambia tu perspectiva: cuando estás desmotivado es fácil dejarse llevar por la negatividad. De hecho, tal vez tengas motivos, no es fácil estar motivado cuando las cosas te salen mal pero si es posible cambiar la actitud que tienes ante los problemas:
Si no está en tus manos cambiar una situación que te produce dolor, siempre podrás escoger la actitud con la que afrontes ese sufrimiento. Viktor Frankl

-Revisa tu diálogo interno: cuando estás desmotivado sueles fijarte en todo lo negativo, tú dialogo interno es negativo. Si eres consciente de tus pensamientos, también puedes elegir mejorarlos. Una manera de hacerlo es practicar la gratitud, enfocándote conscientemente en lo positivo que tienes que agradecer, disiparás esa negatividad.

-Cuida el lenguaje: cuando te pilles en este dialogo interno negativo cámbialo por otro más positivo: en lugar de “no puedo hacerlo” di “¿Cómo puedo hacerlo? 

-Cambia tu postura corporal: al estar desmotivados tendemos a ir cabizbajos y encogidos como el jorobado de Notre Dame. Ponte recto y sonríe aunque no tengas ganas, las ganas llegarán. Actúa como si estuvieras motivado.

-Se honesto: si te sientes mal habla con un amigo, te darás cuenta de que no eres el único que pasas por momentos de desmotivación y te servirán de apoyo. Intenta ceñirte a los hechos de porque estás desmotivado sin caer en el rol de la víctima.

-Sal afuera y conoce gente: ya que estás en esta situación intenta conectar con gente que estando en tu situación o habiendo pasado por algo similar han conseguido recuperar la motivación, te pueden servir de referente.

-Recuerda tu para qué: a mí este me parece uno de los aspectos más importantes, cuando tienes clara tu visión, el para qué quieres conseguir una meta, llevarás a cabo las acciones necesarias con mucha más motivación. 

Hemos mencionado anteriormente el caso de mi amigo que se va a correr en pleno agosto, las ganas son diferentes cuando tienes claro que quieres conseguir con ello que si no sabes para que lo haces.
Visualiza lo bien que te vas a sentir cuando hayas logrado lo que quieres. Tómate la vida como un juego y juégalo siendo fiel a ti mismo y haciendo aquello que te motive. Piensa en los beneficios de conseguir aquello que quieres.

Fíjate que diferente se puede ver una misma realidad cuando tenemos un para qué:


Cuenta una vieja historia que en una antigua e importante ciudad europea en el medievo había tres hombres trabajando en una obra. Los tres estaban colocando piedras, una tras otra, que iban uniendo con argamasa.

Se acercó un peregrino al primero y tras saludarle le preguntó con curiosidad sobre lo que estaba haciendo. Casi sin mirarlo, incluso algo molesto ante quien pregunta lo obvio, el hombre que estaba trabajando le dijo que estaba poniendo ladrillos.

Se acercó el peregrino a un segundo hombre que estaba trabajando unos metros más allá y con la misma curiosidad, tras saludarlo, también le preguntó sobre qué era lo que estaba haciendo. Este segundo hombre le dijo que estaba levantando una pared.

Aun tuvo curiosidad el peregrino para acercarse al tercer hombre que estaba unos metros más allá y tras saludarle también le pregunto sobre qué era lo que estaba haciendo. Este tercer hombre, miró con entusiasmo al peregrino y le espeto: estoy construyendo una hermosa catedral.


-Créate un plan de acción: hemos comentado antes que a veces la motivación está empañada de bruma porque tenemos tal caos mental que no sabemos cómo hacer las cosas ni cómo empezar que nos desmotivamos. Créate un plan de acción, organízate en una agenda las distintas actividades que quieres realizar y ponles fecha.

-Utiliza música motivadora y videos de motivación, inspírate con las cosas del día a día, ponte post inspiradores. 
motivación


-Créate un lugar de trabajo agradable y organizado.

-Búscate un compañero con el que te comprometas en cumplir determinadas acciones, eso te ayudará a mantenerte motivado.

-Crea automatismos y rutinas diarias que te ayuden a motivarte: deporte, rutinas de agradecimiento, diario de logros, visualizaciones, afirmaciones, etc.

-Ponte las cosas fáciles: si estás pensando en ir a nadar al día siguiente y sabes que tu motivación se puede ver quebrada, prepárate la bolsa el día anterior, tenlo todo dispuesto para no poder ponerte excusas.

-Simplifica tus tareas: Si hay algo que tienes que hacer que te abruma, elimina lo accesorio y céntrate en lo importante, no te dejes cegar por el perfeccionismo.

-Haz las tareas difíciles primero

-Elimina las distracciones a tope para evitar caer en la procrastinación

-Obtén resultados y festéjalos

-Sumérgete en el tema pero no descuides las demás áreas de tu vida que van bien, a veces es necesario desconectar y apoyarnos en otra cosa para llevar mejor los momentos de bajón.

-Rodéate de gente con objetivos similares a los tuyos. Ya sabes que cada uno tiende a identificarse con los de su manada.

Como puedes ver la motivación es algo que va y viene. No podemos esperar estar siempre motivados pero sí que podemos ser parte activa para recuperar la motivación perdida y para dispersar la bruma que está bloqueando nuestra motivación.

Y tú ¿Qué haces para motivarte? Cuéntanoslo en los comentarios y comparte este artículo con todo aquel que necesita de motivación.